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El valle de la soledad de la ilustración técnica

Hace poco compartí una publicación en un grupo de ilustradores y diseñadores en Facebook con más de 100,000 miembros en la que pregunté si había alguien que se dedicara o tuviera interés en la ilustración técnica. Las respuestas fueron abrumadoras: 2.

No me extraña. En todas las redes donde he compartido mi trabajo es un reto encontrar a gente que se apasione por la ilustración técnica. No importa si se trata de dribbble, ArtStation, Behance, Instagram, AOI, etc., tal parece que somos muy pocos quienes nos dedicamos profesionalmente a este arte.

¿A quién ¢%&#*! le pueden gustar las clases de dibujo técnico?

Lo entiendo. Yo mismo odiaba las clases de dibujo técnico en la escuela, a pesar de que dibujar ha sido mi pasión desde que tengo memoria. Recuerdo la frustración de sentirme acotado por una serie de reglas geométricas que limitaban la libertad con la que dibujaba fuera de esa clase. Si alguien me hubiera dicho que de adulto me dedicaría a la ilustración técnica, no le habría creído jamás.

¿Por qué la ilustración técnica es el “patito feo”?

Considero que una de las razones por las que la ilustración técnica es el “patito feo” del arte y tiene pocos adeptos es precisamente el conflicto entre las reglas inherentes a la técnica y la libertad característica del dibujo. Este conflicto es más evidente en los primeros acercamientos a la ilustración técnica, que la hace ver más complicada y difícil de lo que en realidad es.

Otra razón puede ser el hecho de que el concepto romantizado de creatividad suele asociarse a todas las técnicas de ilustración, con excepción, claro, de la ilustración técnica. Debo aceptar que yo también llegué a considerarlo así; pero limitar el alcance de la creatividad y hacerla exclusiva de ciertos saberes es privarse de un sinfín de posibilidades.

Finalmente, el proceso a seguir para lograr una ilustración técnica de buena calidad puede resultar intimidante para quienes se resisten a pasar por el campo de las matemáticas y la geometría, saberes que apenas son el principio, pues dependiendo de lo que se pretenda ilustrar hay que comprender conceptos de ingeniería, mecánica, tecnología, ciencia, flujo de información, etc.

Nunca digas: “de esa agua no beberé”

Con el tiempo, terminé por aceptar que toda mi niñez fui un ilustrador técnico “de closet”. A base de prueba y error, de forma autodidacta entendí que las reglas que consideraba limitantes u obstáculos para dibujar, eran en realidad las bases para estructurar y darle vida a las imágenes que tenía en mi cabeza, tal cual las imaginaba. Estas reglas terminaron por ser la retícula tridimensional por donde pude trazar con entera libertad sin que mi obsesión se viera comprometida. Incluso llegué a entender que entre más reglas aprendía, tenía más herramientas para trabajar con aún más libertad.

Estructura para soñar

De hecho, uno de los primeros trabajos de ilustración técnica que me atraparon fueron las ilustraciones que Alexis Sivirine hizo para el libro Calypso de Jacques Cousteau de 1983 (cuando yo tenía 6 años). Podía pasar horas viendo con detenimiento los detalles del interior del famoso barco en un impresionante desplegable a colores, sus planos o la evolución para ser transformado de dragaminas a un buque oceanográfico totalmente equipado. Soñaba con viajar a bordo del Calypso y ¿por qué no?, construir mi propio barco. Así que dibujaba barcos navegando en aguas abarrotadas de fauna marina.

Evolución geométrica

Después llegaron los aviones y descubrí lo útil que es la cuadrícula azul de los cuadernos escolares para dibujarlos. Y no paré; continué explorando por mi cuenta, al principio alejado de las matemáticas y la geometría para luego reconciliarme con ellas y utilizarlas en todas mis ilustraciones.

Al día de hoy, sigo explorando y encontrando nuevas formas de aplicar las matemáticas para encontrar caminos por donde dirigir mis trazos. Desde hace años, mi estilo se caracteriza por utilizar proyecciones isométricas con líneas en ángulos determinados para lograr un efecto tridimensional. Quizás suene abrumador, pero cuando te familiarizas y logras sistematizar todos estos ángulos y cálculos aritméticos para dibujar, se obtienen resultados muy satisfactorios que puedes reutilizar fácilmente una y otra vez.

En cuanto a la creatividad en la ilustración técnica

Así que sí, se requiere de mucha creatividad para encontrar los caminos infinitos que la geometría esconde para dirigir los trazos de una buena ilustración técnica.

Ventajas insospechadas de la ilustración técnica

• Poca competencia

Pensándolo bien, no es del todo malo ser parte de una comunidad tan pequeña en el mundo de la ilustración, así hay espacio para que todos nosotros encontremos nuestro nicho cómodamente sin la competencia acérrima que viven el resto de los ilustradores.

• Los ajustes del cliente suelen ser razonables

Otra ventaja que me encanta es que nuestro trabajo no está expuesto a los caprichos que los clientes se suelen permitir cuando encargan trabajos para ilustrar temáticas llenas de subjetividades. En el mundo de los ilustradores técnicos no existe el “ponle más diseño” o “súbele, bájale, hazlo más grande, etc., etc., etc…”. Por lo regular trabajamos para clientes que saben exactamente lo que quieren (en su mayoría, ingenieros y desarrolladores), mientras nosotros sabemos hacer nuestro trabajo para solucionar sus problemas de comunicación. Si me encargan ilustrar un submarino para una revista de tecnología, puedo estar seguro de que en ningún momento me pedirán que añada más escotillas porque al editor se le ocurrió.

• Detección de problemas en puntos ciegos

Un valor agregado de la ilustración técnica es el barrido y detección de errores. Para realizar mi trabajo debo ser extremadamente minucioso para interpretar el material que mis clientes aportan como referencia de la ilustración. Al estudiar este material y durante el trazado de la ilustración se pueden detectar inconsistencias en los productos que pueden corregirse antes de la publicación de su documentación técnica. Hablo de esto en el post Instructivos Truper I.

• Trabajo valorado

Y por supuesto, está la posibilidad de una retribución digna. Especializarse para entender el intrincado pensamiento de quienes se dedican a la ciencia, ingeniería y tecnología para reflejarlo en una ilustración que todo público pueda entender es algo que valoran, y mucho, los clientes que desarrollan proyectos en estos campos.

Mis héroes de la ilustración técnica

Para terminar, me encantaría mencionar y compartir el trabajo de tres artistas con talento descomunal en ilustración técnica, que me inspiran y que cuando veo sus trabajos me hacen sentir lo mismo que sentía de niño cuando me perdía en los trazos de las ilustraciones de Alexis Sivirine:

Tony Matthews

Tony es referente indiscutible como ilustrador técnico en la industria automotriz. Contagia su pasión por el automovilismo a travez de los trazos con los que a dado vida a los intrincados componentes y mecanismos de los motores de Fórmula 1 que lo han acompañado desde hace décadas.

Superpoderes:

• Aplicación de tinta
• Acuarela, gouache y aerógrafo
• Conocimientos de ingeniería

Rafael Araujo

Rafael tiene un talento para dibujar y hacer visibles las matemáticas como nadie. Sus estudios acerca de la proporción áurea o el vuelo de las mariposas nos revelan las matemáticas que normalmente están ocultas a plena vista, pero que le dan sentido al universo que nos rodea.

Superpoderes:

• Trazo matemático
• Conocimientos de proporción áurea

Max Degtyarev

Max, además de hacer fantásticas ilustraciones para describir el funcionamiento de diversos dispositivos, es experto en congelar escenas de la cultura pop llenándolos de incontables detalles en donde es adictivo perderse en búsqueda de pequeñas historias dentro de otras historias.

Superpoderes:

• Unión de técnicas tradicionales y digitales
• Manejo del color

Espero que este artículo haya servido al menos un poco para enaltecer el arte de la ilustración técnica e impulsar a quienes se quieran acercar a este fantástico mundo: pasen, siéntanse con comodidad: tenemos espacio de sobra.

¿Conoces algún otro artista de ilustración técnica?

Gracias por leer y compartir.

Francisco GyG